Columna
El Puercoespín
Alejandro Arcos Catalán apenas rindió protesta como alcalde de la capital de Guerrero el pasado 30 de septiembre, día en que fueron renovados todos los ayuntamientos del estado, y al sexto día fue asesinado y decapitado.
El jueves 3 de octubre asesinaron a uno de sus colaboradores más cercanos, el secretario General del Ayuntamiento de Chilpancingo, Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez, en una calle del centro de la ciudad, y a unos días de que tomara protesta, el 28 de septiembre, asesinaron a quien se sabía sería su secretario de Seguridad Pública, Ulises Hernández Martínez.
Los asesinatos de estos tres funcionarios del Ayuntamiento de Chilpancingo, Guerrero, puso en evidencia el alto nivel de ingobernabilidad del Estado de Guerrero, al grado que diversas fuerzas políticas están pidiendo la renuncia de la gobernadora.
En Guerrero existe una deteriorada gobernanza producto de quien ocupa la titularidad del Poder Ejecutivo, Evelyn Salgado, hija de Félix Salgado Macedonio, situación que ha generado una elevada violencia originada por el crimen organizado. Ni gobierna Evelyn por falta de experiencia y conocimiento de la sociedad política. Tampoco gobierna Félix Salgado porque éste se la pasa entre la entidad y la CDMX por ser senador de la República.
El asesinato de Alejandro Arcos Catalán puso en evidencia que los cuadros impuestos como gobernadores por Morena desde el centro y al haber disuelto los órganos de dirección locales del partido están empezando a entrar en crisis producto de su ineptitud política y su incapacidad de hacer trabajo político más allá de las oficinas burocráticas del gobierno del estado.
En Guerrero la crisis política fue detonada por un magnicidio, el asesinato y decapitación del presidente municipal de la capital. El hecho y las formas resultan repugnantes.
Colima va transitando por los mismos rumbos. En Colima el Crimen de Puerta de Ánzar también es un parteaguas en la escalada de incompetencia y descontrol de los actos de alto impacto del crimen organizado, sin bien no produjo una crisis política, lo cierto es que la actual LXI Legislatura se declaró inexistente y tan solo será una oficialía de partes del Poder Ejecutivo y la Comisión Estatal de Derechos Humanos guardó un sepulcral silencio que lanza el mensaje de que los ciudadanos no podrán contar con ella.
El Crimen de Puerta de Ánzar desapareció, de un tris tras, las vidas de seis presuntos culpables y la vida política de dos instituciones: el Congreso y la CEDH.
El crecimiento de los crímenes de alto impacto por parte del crimen organizado y el acoso a los medios de comunicación podrán en crisis a varios estados de la republica que están actuando con prácticas políticas, corrupción y programas neoliberales más cercanos al neoliberalismo que a la Cuarta Transformación.
Como dice Ricardo Ravelo: “El grave problema de este país, además de la violencia, es la narcopolítica, una de las causas que generan violencia e ingobernabilidad. Pero ese fenómeno sigue impune. Nadie quiere desmantelar la red de políticos-criminales. Esa es la principal causa de la violencia.”
Baja California es un estado que por esos rumbos va aceleradamente, pues el gobierno estatal ya empezó a acosar a los periodistas críticos al gobierno local.
Sinaloa está que arde y la crisis política está en ciernes. La violencia en este estado es claro que es el preámbulo a varias crisis política locales.
Y hoy martes 8 de octubre circuló el trascendido de que Eruviel Ávila presidirá la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados de la Auditoria Superior de la Federación. Se imagina usted a un corrupto destacado del Partido Verde “vigilando” que no haya corrupción. Hasta ahora este sujeto los desmintió, pero todo indica que si va a esa comisión y con Ricardo Monreal todo es posible.
No olvidemos que Alejandra Del Moral, la misma que dijo “Morena destruye todo lo que toca” y fue candidata a la gubernatura del Estado de México y, además, acusada de haber desviado 5 mil millones de pesos del erario estatal, ahora es la flamante directora de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID).
Con las decisiones tomadas en el actual gobierno de Morena se están acelerando los pasos para meter en crisis a los gobiernos locales y la corrupción avance aceleradamente en el Gobierno de México al poner al frente de los puestos de primer nivel a corruptos del Partido Verde.
No cabe duda de que Morena avanza y avanza aceleradamente hacia la corrupción, una Verde corrupción.
Urge decapitar a los gobiernos de Morena. Los gobernadores, los malos gobernadores como Evelyn Salgado, Marina del Pilar Ávila e Indira Vizcaino deben de dejar de encabezar sus gobiernos y debe ser Morena y el Gobierno de México quienes deben de removerlos por el bien de todos para evitar las crisis políticas regionales que vienen.
Los morenistas tan solo contestaran ante lo evidente: las cosas están peor en Guanajuato.