Columna
El Puercoespín
Tener en la mira a algo o a alguien significa que dicho objeto o persona está siendo objeto de atención y observado muy detenidamente. En sentido figurado, significa tenerlo en el blanco como si estuviera escrutado a través de una mira telescópica.
Colima tiene aproximadamente 750 mil habitantes de los cuales más de 396 mil cuentan con un vehículo particular para transportarse. El parque vehicular aumenta anualmente 15 mil unidades, entre flota priva y mercantil. En el estado circulan automóviles, camiones, motocicletas y remolques. Todos pagan su calcomanía. Lo anterior significa que el 52 % de los habitantes, cuando menos, cuentan con una unidad motorizada para movilizarse.
El gobierno del estado está estudiando la posibilidad de imponer un gravamen a los camiones que circulen por el llamado macro libramiento que serían en gran cantidad por el crecimiento del puerto de Manzanillo.
La titular del Poder Ejecutivo comentó en su conferencia de prensa Diálogos por la Transformación, a pregunta expresa de uno de los reporteros, que se estaba estudiando, en conjunto con el Gobierno de México, crear un impuesto al transporte de carga, pues las ampliaciones del puerto de Manzanillo provocarán una mayor cantidad de tráfico y ella ve, como muy conveniente, imponerles un gravamen como una forma de aumentar la recaudación fiscal y así aumentar los ingresos propios y poder pagar las deudas que nos dejaron los anteriores gobiernos.
La versión de la gobernadora de que se está estudiando un posible impuesto al transporte de carga en conjunto con la federación no resulta creíble. En la agenda del Gobierno de México no se contempla ninguna reforma fiscal y mucho menos el aumento o la creación de nuevos impuestos, solo actualizarlos conforme a la tasa inflacionaria. La presidentade México lo ha reiterado en múltiples ocasiones.
El gobierno de Colima podrá estar pidiendo asesoría de cómo instrumenta el impuesto al transporte de carga, pero que estén estudiando la creación de un posible impuesto no resulta creíble.
En el fondo lo que está pensando hacer el gobierno de Colima es crear un impuesto al transporte de carga por la vía de la reciente aprobación de la ley medioambiental del gravamen al CO2.
Al parecer la estrategia es principiar con gravar el transporte de cargo y como segundo paso gravar todos los vehículos por la vía del holograma.
Que bueno que la gobernadora se sinceró. No contestó cuánto se ha reducido la deuda ni cuantos prestamos ha pedido, pero lo único certero es que el gobierno está con las finanzas al filo del desastre y precisa de aumentar su recaudación fiscal.
Mi tesis es que van a probar, por la vía de imponer un gravamen al transporte de carga, cómo reaccionan los ciudadanos y dependiendo de la reacción, cualquier día, como acostumbra el Congreso del Estado, imponer un gravamen a los más de 396 vehículos con los que cuenta el estado de Colima.
O de plano en forma directa van a imponer el gravamen y pasar a pagar los desvíos y raterías de los gobiernos quienes tenemos autos, pero los que no tienen vehículo tambiénterminarían afectados porque el transporte públicoigualmente se vería gravado y el costo se lo pasarían a los usuarios.
No sería mejor lograr consensos por la vía de recuperar los recursos públicos perdidos y castigar a los culpables para mandar el mensaje de que se necesita más dinero, pero ese dinero sería bien aplicado y los culpables castigados.
Hasta ahora no sabemos cuánto dinero se ha recuperado y quién o quiénes han sido castigados.
Si el gobierno no transparenta la aplicación del impuesto y actúa con honestidad y claridad y construyendo una agenda para el beneficio de los ciudadanos, los colimenses no vamos a tolerar la imposición de un gravamen para salvar a los rateros.
Por lo pronto 396 mil ciudadanos estamos en la mira para saquear nuestros bolsillos por un gobierno que no trata de convencernos, sino que intenta imponer porque no ha tenido la honestidad de abrir el debate público.