Colima, México, Avanzada (03/03/2024).- A pesar de la retórica del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que asocia la privatización con la corrupción neoliberal, la realidad en Colima desafía el discurso presidencial. La gobernadora de Colima, Indira Vizcaíno Silva, continúa la práctica neoliberal de privatizar los bienes del Estado.
El exgobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez, es señalado por llevar a cabo diversas privatizaciones durante su mandato. Entre ellas se encuentran el zoológico, Macrolibramiento, C5i, Planta de Tratamiento de Aguas Residuales y hasta panteones. Estas decisiones, muchas de las cuales tienen tufo a corrupción, siguen sin ser revisadas por la actual administración encabezada por la gobernadora Indira Vizcaíno Silva.
Uno de los casos destacados es el de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), cuya concesión fue extendida por 15 años adicionales durante el gobierno de Peralta, beneficiando a la empresa privada hasta el año 2041. A pesar de que la PTAR ya se había pagado tres veces según datos de la Ciapacov, la ampliación de la concesión plantea serias dudas sobre la gestión de recursos y el presunto “atraco” a los ciudadanos.
En cuanto al nuevo panteón “Bosque del Edén” y la concesión otorgada a Casa Colima, S.A. de C.V., se evidencia una participación cercana del exdiputado Pedro Peralta Rivas, primo del exgobernador Peralta Sánchez. Este proyecto, parte de una asociación público-privada, nuevamente sugiere un entrelazamiento de intereses que podrían comprometer la transparencia en la toma de decisiones.
Otro ejemplo es el Parque y Zoológico Metropolitano “Griselda Álvarez” (hoy ECOPARC), concesionado a la empresa Fiesta Zafari SA de CV durante el gobierno de Peralta. A pesar de las protestas y preocupaciones por el maltrato animal, la concesión no fue revocada, poniendo en entredicho el compromiso de la gobernadora con el bienestar de los animales.
En el ámbito de la seguridad, el proyecto C5i entregado a Seguritech también se destacó por su costo creciente y la falta de transparencia en la gestión de recursos. Y a pesar de que los diputados exigieron una investigación sobre el manejo de los fondos destinados a este proyecto, que inicialmente tenía un presupuesto determinado que fue aumentando sin justificación aparente.
A la llegada de la gobernadora Indira Vizcaíno Silva, dada su militancia de izquierda y en congruencia con el discurso presidencial, se hubiera supuesto que la privatización del Macrolibramiento realizada por Peralta se echaría abajo, sin embargo, continuó. La mandataria consiguió la nulidad del contrato en el que Peralta otorgó la concesión a un particular y volvió a licitarla, los ganadores fueron las empresas RECSA y PYNFRA, que estarán a cargo de su construcción y operación durante 30 años, recuperando la inversión mediante el cobro de peaje.
La privatización de servicios públicos en Colima persiste a pesar del discurso presidencial en contra de esta práctica. La falta de revisión y acción por parte de la actual administración plantea interrogantes sobre la coherencia entre el discurso político y las acciones concretas en el Estado.