“¡Me va a matar!”: gritó Laura antes de ser asesinada por su exnovio

California, Avanzada (10/04/2025).- El 2 de septiembre de 2020, Laura Sardinha hizo todo lo que estaba a su alcance para protegerse: fue a los tribunales, obtuvo una orden de restricción y cambió las cerraduras de su apartamento. Pero ni la ley ni las cerraduras pudieron evitar lo que sucedería esa misma noche.

Laura, de 25 años, fue brutalmente asesinada por su expareja, Craig Charron, un hombre 14 años mayor que ella, con quien había mantenido una relación marcada por el abuso y el miedo constante. Ese miedo quedó registrado en una grabación que estremeció a todos los que la han escuchado. Un mensaje de voz de 37 segundos donde se oye su respiración entrecortada, los gritos de desesperación, y dos frases que hoy retumban como eco de una tragedia anunciada: “¡Me va a matar!” y “¡Aléjate de mí!”.

Ese audio fue una de las pruebas clave que llevó al jurado, casi cinco años después del crimen, a declarar culpable a Charron. “Si lo escuchan con atención, oyen a una mujer narrando su propio asesinato”, dijo al jurado la fiscal adjunta del condado de Orange, Janine Madera, durante los alegatos finales.

La noche del asesinato, Charron irrumpió en el apartamento de Laura armado con varios cuchillos. Ella hablaba por teléfono con su madre y su mejor amiga cuando el ataque comenzó. La llamada se cortó. Minutos después, Laura logró dejar el último mensaje antes de ser acuchillada fatalmente en el pecho, la cabeza y el rostro. El ataque fue tan violento que uno de los cuchillos quedó doblado por la fuerza de las puñaladas.

Cuando la policía llegó, encontró a Laura sin vida y a Charron herido. Alegó defensa propia, pero los fiscales aseguraron que sus lesiones eran autoinfligidas, una puesta en escena para desviar responsabilidades.

Durante el juicio, además del mensaje de voz, se presentaron grabaciones anteriores hechas por la propia Laura, en las que describía con detalle el abuso físico y emocional que sufría. En una de ellas relató cómo Charron la golpeó tan fuerte que le rompió un tímpano. Tres exparejas de él también testificaron, revelando un patrón de violencia y antecedentes de órdenes de restricción en su contra.

Craig Charron, exmédico de combate y veterano de la Fuerza Aérea, fue encontrado culpable este martes por el asesinato de Laura Sardinha. Enfrenta ahora una sentencia que podría significar cadena perpetua.

El caso causó indignación en todo Estados Unidos, no solo por la brutalidad del crimen, sino porque evidencia una verdad dolorosa: a pesar de buscar ayuda, Laura no pudo escapar de la violencia de género que finalmente le arrebató la vida. El eco de su voz sigue resonando como un grito urgente por justicia y protección para todas las mujeres que viven bajo amenaza.