Colima, México, Avanzada (2/09/2018).- En la casa ubicada en la calle José Mojica 511 en la colonia Miguel Hidalgo en Tecomán, la vida de la familia Castañeda Córdova transcurría con tranquilidad, hasta el 19 de mayo de 2017, cuando se dieron cuenta que a Kelsy Naomi, de ocho años de edad, no la encontraban por ningún lado.
La tarde de ese viernes 19 de mayo, don Roberto, el jerarca de la familia, salió a buscar a su pequeña hija de cabello rizado y tostado por el sol tecomense y por más que preguntó no encontró rastros de la menor. Así se la ha pasado los últimos 16 meses.
Ese día, Kelsy Naomi, una niña vivaracha, entusiasta y con unos grandes ojos color café, salió a la calle a ayudar a una señora a vender donas. Don Roberto, nunca estuvo de acuerdo con que sus hijos hicieran ese tipo de actividades, a pesar de la situación económica de la familia.
Kelsy, quien el próximo 28 de octubre cumple 10 años, desapareció el 19 de mayo de 2017, y hasta la fecha, la autoridad no tiene ninguna pista que permita saber qué sucedió con la menor.
Su familia, principalmente sus padres, recorrieron todas las zonas que pudieron para encontrar rastro de la niña, “pero no hubo nada”, dijo don Roberto, en enero de este año, cuando se le preguntó por los avances en el caso.
El hombre repitió una y otra vez que el gobierno del Estado, a cargo de Ignacio Peralta Sánchez, jamás les interesó resolver el caso de Kelsy, y hubo meses en los cuales, ni si quiera había un agente encargado de la desaparición de la menor, cuando la situación debió ser un asunto prioritario.
Siete meses después de la desaparición de Kelsy, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) reconoció la desaparición de Rodrigo Flores Maldonado, también de 8 años de edad.
El niño se encontraba con su familia en un rancho de San Miguel de Ojoa de Agua en Tecomán, sin embargo salió del lugar y no se supo nada de él, hasta la fecha.
El menor fue visto por última vez alrededor de las 11 de la mañana del viernes 8 de diciembre de 2017. Como señas particulares tiene una cicatriz en su labio superior producto de una cirugía. La autoridad no ha dado con su paradero, ni existe una explicación clara que permita suponer qué sucedió con él.
Kelsy y Rodrigo desaparecieron en Tecomán, el municipio más violento del país, y con graves problemas sociales.
Además de ellos dos, existen 11 menores de edad que se encuentran desaparecidos, según el Registro Nacional de Personas Extraviadas y Desaparecidas, sin embargo no existen fotografías, ni nombres que permitan identificar a los infantes.