Colima, México, Avanzada (10/11/2025).- En Colima, el drama de la desaparición de personas se extiende más allá del tiempo. Desde hace más de una década, familias enteras viven en silencio la ausencia de sus seres queridos, sin respuestas y con la esperanza sostenida únicamente por las fichas de búsqueda que, a cuentagotas, emite la Comisión de Búsqueda de Personas. Entre el 25 de octubre y el 9 de noviembre, el organismo estatal publicó 17 fichas: nombres, rostros y fechas que trazan un mapa del dolor, en el que Manzanillo vuelve a ocupar el centro de la tragedia.
Los registros más recientes dan cuenta de casos que se remontan a más de diez años atrás. Uno de ellos es el de Alberto Isidoro Godínez López, desaparecido el 27 de diciembre de 2011 en Manzanillo, cuya ficha apenas fue emitida el 7 de noviembre de 2025. A él se suman Misael Esaú Real Rodríguez, visto por última vez el 12 de enero de 2011 también en el puerto, y Salvador Cobián Cisneros, quien desapareció el 27 de enero de 2012 en la misma zona.
En todos los casos, la constante es la misma: años de incertidumbre y silencio institucional. Las familias, según denuncian colectivos de búsqueda, viven un doble miedo: a no encontrar a los suyos y a ser señaladas o amenazadas si se atreven a denunciar. Por eso, aseguran que las cifras oficiales, más de mil 400 personas desaparecidas en la entidad, apenas reflejan una parte del horror.
La Comisión de Búsqueda ha emitido también fichas recientes que muestran que la desaparición no se detiene. Entre ellas, la de Irene Daryela Mendoza Castrejón, de 16 años, vista por última vez en Villa de Álvarez el pasado 5 de noviembre, y la de Luisa María Estrada Montalva, de 29 años, quien desapareció el 21 de octubre en Manzanillo. En este mismo municipio se registraron los casos de Roberto Manzo Silva, el 18 de octubre; Arturo Martínez Mendoza, el 7 de septiembre, y Jorge Mendoza Guzmán, cuyo paradero se desconoce desde el 10 de mayo de 2023.
Las fechas cruzadas entre desapariciones y reportes dejan ver una constante en Colima: el tiempo se detiene para las familias que buscan. Jesús Guillermo Morales Valenzuela desapareció el 30 de julio de 2021, pero su ficha se publicó el 27 de octubre de este año. Lo mismo ocurre con Ángel Paúl Luna Santiago, ausente desde abril de 2016 y reportado ante la Comisión el 23 de octubre de este año.
La Comisión también documentó casos fuera de Manzanillo, como el de César David Serrano Granados, de 44 años, visto por última vez el 27 de octubre en Minatitlán, y el de Juan Manuel Gutiérrez González, desaparecido el 29 de mayo de 2018 en Armería, cuya ficha se activó el 20 de octubre de este año.
En Colima, la desaparición se ha convertido en un fenómeno sostenido, invisible para muchos y permanente para quienes lo viven. En palabras de los propios colectivos, “no hay paz posible mientras sigan faltando los nuestros”.